Por: Katherine Acevedo Ortiz. A lo largo de nuestra vida, ¿Se han puesto a pensar sobre las distintas
decisiones que tomamos a diario sin darnos cuenta? como por ejemplo ¿Qué
haré hoy? ¿Qué ropa me pondría? ¿Qué comería? ¿Qué hare en mi tiempo
libre? ¿En qué invertiré el dinero que reciba en este mes? o ¿Con cuales
amigos saldré este fin de semana? Por lo que resulta inevitable en nuestra
supervivencia humana la opción de elegir, siendo la elección más
imprescindible que determinaría el rumbo de nuestro destino la cuestionante
del ¿Qué estudiare después de culminar mi ciclo de secundaria? y ¿Ahora qué
sigue?
¡Y si! bien es cierto que el ¿Ahora qué sigue? En plena etapa de la juventud
con frecuencia es una de las decisiones que generan un bombardeo de
emociones, dudas, confusiones, miedos y expectativas al aire por la
incertidumbre de no tener claro lo que quiero construir en mi proyecto de vida,
de hecho un estudio realizado en Lima-Perú por la institución ´´Educación al
futuro´´ en el año 2022 revela que, el 80% de jóvenes a punto de culminar sus
estudios básicos, no saben que carrera seguir, teniendo como resultado una
fuente detonante de frustración que podría predecir o no el éxito profesional de
nuestra vida.
Sin embargo, ante esta necesidad de no saber que hacer o elegir
correctamente una posible carrera universitaria quizás por la falta de
orientación de sí mismo, altas expectativas de la sociedad, por la presión
familiar, pocos recursos económicos o por las circunstancias dadas, es donde
está implicada la toma de decisiones, la cual consiste en elegir una opción
entre dos o más alternativas para resolver una situación o problema, como en
este caso, elegir una profesión vocacional que sea de impacto a nuestra vida,
que nos guste, nos convenga y que verdaderamente nos apasione. Pero para
determinar que la decisión que se ha de elegir sea la más certera es necesario
que tengamos en cuenta las siguientes recomendaciones durante este proceso
de ¡DECISION!
1-Realizar un autoanálisis de conocimiento sobre ti. Lo primero que
debemos de tomar en cuenta, antes de elegir una carrera profesional es que
identifiquemos nuestras mejores habilidades, intereses, potencial y
competencias, pero ¿De qué forma lo podemos reconocer? A través de un
autoconocimiento sobre sí mismo en base a las preguntas ¿Para que soy
bueno? ¿En qué materia me va a mejor? ¿Qué hago con más facilidad?
¿Cuáles son mis intereses? ¿Qué me gusta hacer en la vida? ¿Y en qué área
me desempeño mejor? Por lo que, dependiendo de lo que me haga sentir más
seguro, con mejores destrezas para desarrollar una acción o de lo que me
haga sentir satisfecho dependerá la carrera que quiero ejercer en un futuro.
2-Elabora una lista de opciones. Una vez identificado tu perfil, preferencias,
habilidades o competencias una alternativa para la toma de decisiones en
cuanto a las posibles carreras universitarias a estudiar, es elaborar una lista de
opciones donde se plasmen aquellas profesiones que te llamen la atención por
orden de prioridad y que profundices sobre ella. Por ejemplo, a través de esta
lista de opciones pueden investigar en que consiste esa profesión, la duración,
la universidad que mejor la importen, las necesidades que hay en el país, las
oportunidades de trabajo que tendrán, el pensum, el costo o cuales son los
requisitos para poder estudiarla. Esta lista se puede realizar desde cualquier
celular, computadora o dispositivo, permitiendo de esta manera descartar o
corroborar si en esa lista de opciones está la carrera que verdaderamente
busco o con la cual me sentiré a gusto por el resto de mi vida.
3- Lleva tus intereses a la práctica. El tercer paso durante este proceso de
toma de decisiones es llevar a la práctica el listado de opciones, donde se
aparte un espacio para visitar a las instituciones, centros, escuelas o empresas
que se especialicen en el área que les interesa a fin de informarse sobre las
actividades u oficios laborales que hacen en ese lugar, ya que una buena forma
de descubrir si se es bueno o no en algo es llevándolo a la práctica por medio
de estas visitas para solo así determinar si realmente esa es la carrera
profesional donde me visualizaría en un futuro.
4-Haz de ser TU quien tome la decisión de ¿Que profesional serás y en
quién te quieres convertir? Haz de ser TÚ quien tome la decisión de elegir
que estudiar sin dejarte influenciar por presiones externas provenientes de la
familia, expectativas de la sociedad, razones económicas o porque algunas
profesiones se ponen de moda en un momento dado, recuerda que se trata de
una decisión que marcará tu futuro, ya que con esta formación te enfrentarás al
mundo TÚ, no tu familia, ni tus amigos, ni la sociedad.
De modo que, estas pautas facilitadas son las que nos orientarán en este
proceso de toma de decisión sobre mi verdadera vocación. Por ende, es de
vital utilidad que recuerden estos pasos para empezar a indagar en el YO
personal, en mis intereses, habilidades y de la misma forma recordar que, la
decisión que tomaré hoy relacionada a la profesión que estudiaré dependerá el
rumbo de mi vida en el mañana. ¡No importa lo que decidas hacer y ser, solo
asegúrate de que te haga feliz! Anónimo.
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