Por: María
Alejandra Díaz Suero
El estrés es un tema que ha sido objeto de
estudio para los especialistas desde un largo periodo de tiempo, ya que los
efectos que ocasiona en las personas en algunas circunstancias son evidentes y
preocupantes.
El estrés es un proceso donde se desencadenan
un conjunto de reacciones tanto fisiológicas como emocionales cuando una
persona se enfrenta a un estado de tensión nerviosa o una circunstancia que
puede ser permanente o momentánea y le causa malestar.
Este ha sido un tema de gran interés, donde
se han realizado diversas investigaciones debido al impacto que el estrés
produce en las personas tanto en la salud física y mental, como en el empeño
laboral y académico, incluso en el área familiar se pueden notar los efectos.
El estrés puede causar graves daños
emocionales. Las personas pueden manejar episodios leves de estrés adaptándose
a las circunstancias y utilizando sus mecanismos de defenzas naturales pero una
exposición a un episodio de estrés crónico puede causar daños tanto físicos
como psicológicos.
Señales o síntomas del estrés
El estrés produce un sinnúmero de síntomas,
los cuales solemos confundir con una enfermedad, síntomas como:
·
Dolor de cabeza.
·
Perdida de la memoria.
·
Diarrea o estreñimiento.
·
Fatiga.
·
Cambios de conducta, con manifiesto de
agresividad, depresión dependiendo la circunstancia.
·
Problemas cardiovasculares y estomacales.
·
Insomnio y desgaste físico.
El estrés laboral
El estrés laboral se puede poner de
manifiesto con circunstancias donde existe una sobrecarga de trabajo, excesiva
responsabilidad, un mal clima laboral, el miedo al fracaso, las perdidas que
surgen en un determinado momento, el miedo a perder el trabajo, la preocupación
de estar siempre a la vanguardia acorde con los tiempos y el manejo de las
competencias, entre otros casos. Todos estos factores ponen de manifiesto una
gama de reacciones y hábitos que al final terminan perjudicando nuestra salud,
nuestras relaciones con familiares y amigos. Como son llevarse el trabajo a la
casa, quedarse hasta tarde trabajando, no respetar las horas de almuerzo o de
necesidades fisiológicas, poner el trabajo primero antes que la familia, la
salud y que uno mismo, entre otros hábitos dañinos, pero también el estrés
ocasiona algunas enfermedades muy conocidas en el sector laboral, una de ellas
es el síndrome de Burnout.
El estrés y la vida
familiar
La familia es un núcleo que amerita cuidado
y más cuando está formada por más integrantes como son los hijos e hijas.
Donde los padres se ven
con la preocupación de trabajar más proveer para la familia y equilibrar los
gastos que se presentan, cuidados, educación y las necesidades primordiales de
la familia. Además de la ardua labor que realizan en sus lugares de trabajo.
Toda esta sobrecarga de trabajo tanto en el
hogar como en el trabajo y en la calle para algunos que tienen sus vehículos y
se enfrentan a tapones que no les permiten llegar temprano a los lugares de
destino, y otros que tienen la responsabilidad de llevar sus niños a la
escuela, luego ir al trabajo, regresar e ir de compras y encargarse del hogar
con un cumulo de tareas que a veces ni saben por donde empezar, esto le
ocasiona un estrés que muchas veces se vuelve crónico y llega a causarles un
sinnúmero de enfermedades, una de ellas es la depresión.
Causas del estrés
Cualquier
situación que la persona perciba como una amenaza, le ocasiona estrés, vivimos
en una época donde padecer de estrés es inevitable con el ritmo de la vida
acelerado, las competencias y la vida familiar.
Otros factores estresantes son el ruido,
exámenes, discusiones, desempleo, etc. Todos y cada una de estas situaciones
provocan tensión a las personas ocasionando que se sientan sobrecargados,
cansados, y con tensión, por lo que muchas veces se sienten frustrados.
Recomendaciones
El estrés es producido
por algunas situaciones que son incomodas para las personas por lo que lo
primero que debemos hacer es identificar la situación que no produce
incomodidad para buscarle una solución.
Como un dicho común que existe, que dice: ¨No
te preocupes, ocúpate¨, una vez identificado nuestra situación, debemos pensar
en varias soluciones para ella si es que la tiene y trabajar en la solución.
Descansa, hay varias cosas con las que no
debemos negociar y son con el descanso, el sueño, las horas de almuerzo y las
necesidades fisiológicas primarias, una persona que solo trabaja y descansa
poco se estresa con facilidad, si no se duerme lo suficiente, equivalente a 8
horas el cuerpo no se regenera para estar listo para la jornada del día
siguiente, y si no nos alimentamos bien, no tendremos la resistencia para poder
realizar nuestro trabajo con calidad, así también las debemos tomarnos un
tiempo para realizar nuestras necesidades fisiológicas y mantenernos sanos,
porque incluso el saber que estamos padeciendo una enfermedad nos estresa
bastante.
Reduce las cargas, no tomes mas tareas de las
que no serás capaz de cumplir o que para cumplirlas tendrías que tomarte mas
esfuerzo y tiempo de lo necesario.
Planifica tus tareas y relájate, cuando planificamos
las cosas tenemos un control de todo lo que hacemos, sin que nos agote.
Practica actividades relajantes como yoga u
otra que te produzca relajación corporal y mental.
Aprende a relajarte y
dejar pasar algunas cosas, no todo hay que tomarlo en cuenta.
