Por.
Yoselyn Tiburcio
y
Vickiana Valenzuela.
Dios
nos da la vida y con la fidelidad a Él, tallamos el gran ser adaptable y justo…
La mente y la actitud se desarrolla en las
diferentes etapas de nuestras vidas, las realidades y situaciones que se
presenten desde su pequeña sociedad que es la familia hasta llegar a un entorno
más complejo que es la sociedad misma, con su idiosincrasia y cultura. La
capacidad de pensar, de tomar decisiones de vida y de búsqueda de la felicidad
se convierten en una panorámica holística de como debe forjar una actitud
hibrida ante las situaciones que les toque enfrentar con el paso del tiempo. Es
valentía de dar sabias respuestas, que conforman un ser adaptable y justo ante
la vida que sea o quiere vivir.
La
autora Nathaniel Branden, nos convence en su texto de que la confianza en
nuestra capacidad de pensar, en nuestra capacidad de enfrentarnos a los desafíos
básicos de la vida y el carácter de nuestras actitudes permiten establecer una
autoestima alta o baja, pero con el aprendizaje y la confrontación de su
aspecto biopsicosocial la autoestima se puede inclinar el equilibro del
ser. La autoestima consiste en valorar y
reconocer lo que uno es y lo que puede llegar a ser en la vida. Cabe mencionar
que la resiliencia es la capacidad que un ser humano construye con el paso de
su realidad y puede usarlo de manera positiva ante la vida y forjarse un buen
destino. Entendiendo que se debe producir un pensamiento positivo que va a
generar acciones en su vida para darle paso a ese pensamiento, dando paso a los
buenos hábitos que van generando a una personalidad integral y madura. En
definitiva, esto conllevara a un destino distinto al que le tocó vivir, es
cuando decimos que fue una persona resiliente…
Se
puede claro que sí, estamos hecho para cambiar y adaptarnos.
Branden,
plantea varias claves para alcanzar una buena autoestima: juicio personal, aceptación
de uno mismo, aspecto físico, patrimonio psicológico, entorno socio-cultural,
el entorno laboral, evitar la envidia o compararse con los demás, desarrollar
la empatía, el ponerse en el lugar del otro, hacer algo positivo por los demás.
Evidentemente que cada una de estas menciones generan una actitud positiva en
consecuencia de los buenos aprendizajes que generan una actitud resiliente y
con una mirada más empática desde su yo integral y así poder encarar las
realidades.
La
autoestima verdadera, se logra como parte de un aprendizaje y las experiencias
que la vida va generando en ti. La autora nos plantea los siguientes factores:
La autocrítica genera los niveles de madurez. La responsabilidad de asumir
acciones, actitudes y hábitos que den paso a la personalidad estable y madura
que le dará un destino bueno y diferente. El respeto hacia sí misma construye
una personalidad más holística. La autonomía de tomar sabias decisiones
apropiada a crecer en su entorno. La relación de la autoestima y la calidad de
vida debe ser su dos buenos norte que les permitan afrontar los desafíos que
todos en la tierra debemos asumir y continuar el ciclo de vida.
En
definitiva, todos estos elementos ante mencionados, nos invita hacer una gran
pregunta. ¿Por qué es importante desarrollar la autoestima? La respuesta
pareciera simple en función de lo que se ha planteado, pero no, no es tan fácil
entre líneas, es necesario generar un análisis desde una mirada humana a cada
ser humano. Es la gracia de nuestro creador y la semilla de fe en ideas,
pensamiento y palabras empoderada que van a tallar gramos resilientes en cada
uno para generar un destino único, empoderado y admirable. Evidentemente que si
no se cuenta con experiencias de aprendizaje arraigado en la fe de nuestro
creador o de la convención de Dios que se tenga nos llevará a una autoestima
desatapada o poco equilibrada.
Gracias
a elementos sobre naturales en nuestro camino nos encontramos con agentes
protectores o lideres que transmiten fortaleza y aprendizajes que marcan
nuestras vidas para bien…
Cita
Bibliográfica.
BRANDEN,
Nathaniel, 1995, Los seis pilares de la autoestima, Barcelona: Paidós, ISBN:
978-84-493-0144-5, p. 40.
1 comentario:
Muy de acuerd con su punto de vista
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