Por:
Leonor Regalado & Yolanda Leonardo
El objetivo de este artículo es informar de una manera
sintética y sobre la evolución que ha venido teniendo el liderazgo transformacional
y su relación con la diferentes área no solo a nivel empresarial sino también
en las demás áreas donde hemos sido testigo de los avances en base a los
resultados positivos como es un clima más armónico, productivos, buenas
relaciones interpersonales, carisma y un lenguaje asertivo.
Hacemos un recorrido y decimos que
en los años 60 y 70 el interés de los estudios sobre el liderazgo se centró, no
tanto característica que hay de tener un liderazgo efectivo sino en los sistema
de gestión y los procesos liderazgo. Se consideró que era más interesante saber
o conocer que hacen los líderes más que lo aquellos eran. Los estudios se
sostificaron y se centraron en el análisis de la estructura, la tareas las
acciones; sorprendentemente en estos años la palabra desaparece y sustituida
por la palabra gestor.
En este mismo camino veíamos eso
dique líder en si eran capataces con un látigo el cual se preocupaban porque
los trabajadores se ocuparan de sus oficios y no les importaba su pensar.
Pero vemos como el transcurrir de
los años y la época toda ha evolucionado hasta la fecha se mencionó tenemos
líderes que se llaman gestor y ahora decimos que tenemos colaboradores y no
trabajadores porque son un equipo que colabora a que se logre la gestión.
Más adelante escuchamos decir que el liderazgo no es una
capacidad de influencia que se logre sobre otros grupos o individuos. Sino que el real liderazgo es un conjunto de
actitudes, conocimientos y capacidades que hacen al líder tan distinto del
resto que inspira a quienes están alrededor a seguirle tanto a él como a sus
palabras y ejemplo, y nosotros como
gestores del talento humano estamos promoviendo, desarrollando esos talentos o
virtudes en acción que existen en esas personas, vamos más allá y decimos que
el líder debe estar enfocado en fortalecer y reconocer el valor de todas las
personas, ya que creemos en todo ser humano hay un potencial.
Y hace unos años que como gestores
del talento vemos podemos hablar con las
seguridad que un líder es aquel que da
alas, que promueves esas virtudes como mencionados anteriormente, el que da una
mirada apreciativa nos dice tu puedes, yo confío en ti y se encarga de conocer
su equipo para poder desarrollar ese potencial que hay dentro en conjunto con
la creatividad de cada individuo.
Un buen liderazgo es el cual
mediante su líder es más factible el mostrar que demostrar ya que con sus
acciones nos invita y de una manera nos impulsa a ser su seguidor e imitador y
por ende los resultados obtenidos son
positivos, sin olvidar que como líderes tenemos la responsabilidad de
desarrollar ese personal que se nos fue entregado y el cual seremos los autores
de lo que hagamos de cada uno de ellos .
Terminamos con este pensamiento
debemos optar por ser águila y no pato en nuestra vida, él pato solo se encarga
de patalear lo mismo siempre de manera negativa, mientras el águila se enfoca
en volar más alta cada día mas, no importa que situación tan grande este
pasando ahí es cuando ella renuevas sus alas y se eleva más y más salto.
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