Por:
Celanda Alcántara Díaz
Ana Berta Arno Contreras
Celanda Alcántara Díaz
Ana Berta Arno Contreras
La familia es el
primer ámbito social del ser humano, donde aprende los primeros valores,
principios y nociones de la vida. Es un grupo social con una base afectiva y
formativa, donde conviven personas unidas por lazos de amor y un proyecto en
común.
La familia es la
célula básica de la sociedad, debido a que las organizaciones nacieron con
alguna forma de organización familiar.
La familia es un
concepto de tipo universal que se origina en el matrimonio, es una institución
legal que garantiza a las parejas un círculo llamado sociedad conyugal, que es
reconocido por la sociedad, generadora de derechos y obligaciones.
La violencia de
género es cualquier acto violento o agresión. Basado en una situación de
desigualdad en un sistema de relaciones de dominación de los hombres sobre las
mujeres, lo que trae como consecuencia el daño físico, sexual o psicológico. Es
un problema que traspasa los límites y esta presente en la mayor parte de los
países del mundo.
La violencia
manifiesta en cada uno de los niveles que entregan al individuo en lo físico,
emocional, cognitivo y social, siendo la causa más común los trastornos
psicológicos como la depresión y el trastorno bi-polar, este trae como
consecuencia el daño a la integridad de la persona, impidiéndole tomar
decisiones teniendo que someterse a tratamientos con especialistas.
Es papel
fundamental de las familias orientar a su entorno familiar sobre el rol de la
igualdad de género y desarrollo del ser humano para construir generaciones
relacionadas en ambiente de paz y armonía en todos los contextos sociales en
que se desarrolla.
Según ciertos
estudios se quiere destacar que la violencia de género es heredada, pero me
identifico con algunos estudios realizados, expresan que la violencia no es
heredada de nuestros ancestros, lo que considero que viene dada por la falta de
orientación, seguimiento y comunicación pertinente desarrollada en los
diferentes entornos, sociales, familiares e institucionales. Entre conjunto de
situaciones da a entender que la violencia es parte de lo que se nos enseña
dentro del “ser hombre”, en nuestra sociedad a todos los niveles.
Para reducir la
violencia intrafamiliar es importante compartir las experiencias, la cual se
hace difícil para algunos hombres, ya que se sienten atemorizados a ser burlados,
al manifestar cambios en la forma de relacionar en el contexto social.
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