Por:
Maria Altagracia Vasquez
Al ponernos en un espejo vemos nuestro reflejo de la
parte física, así mismo la personalidad es un reflejo de nuestro yo interior. La
personalidad es la suma total de la característica física, mental, emocional y
social de una persona. La personalidad
no es estática, se desarrolla con el curso de los años y siempre está en
proceso de cambio.
La personalidad es lo que define a una persona, es lo que
hace a una persona diferente y única, es el carácter formado por sí mismo al
pasar el tiempo. La personalidad es el resultado del proceso de socialización
que pasamos como individuo.
Para uno definir una persona primero tiene que conocerla,
la personalidad es la forma en que los seres humanos expresan sus sentimientos,
emociones, pensamientos y su conducta. La personalidad se puede definir como la
estructura dinámica que tiene un individuo en particular.
Desde el nacimiento, cada persona tiene su propia
personalidad, aunque esta no es determinante sino más bien hace referencia a
ciertas características propias, que con el tiempo se irán estructurando y
modificando el comportamiento de la persona.
Hablamos de la conducta, carácter, pensamiento y valores,
todas estas cualidades se refieren a la personalidad de una persona, lo cual
está formado en su yo interior. Esas cualidades son las que identifican la
personalidad de los individuos.
Somos persona con los mismos derechos, deberes
correspondientes a la sociedad.
El concepto de la personalidad, se encuentra en el
carácter, que es entendido como el grado de organización moral que posee un
individuo y que se fundamenta a través de los juicios de valores de una
persona.
Mente y cerebro son aliados sempiternos del yo y la
esencia o sustancia, fuerzas internas de nuestro interior y el carácter
reflexivo que lleva a la verdad de nuestra personalidad, la duda surge como un
punto de equilibrio entre estos fenómenos y la razón y nosotros mismos tenemos
que bregar con todas estas influencias externas que se catapultan hacia lo
interno de nuestro yo, por lo cual lo adoptamos en forma evolutiva al medio
nuestro accionar sensomotor.
Muchas personas esconden su personalidad por miedo al
rechazo social, es como ponerse una máscara, pero la personalidad no es lo que
parece, ¡no debemos escondernos detrás de una máscara! La personalidad es lo
que nos hace una persona única y diferente, es lo que nos hace brillar, es
nuestra esencia personal, es el fruto idealizado, forjado, pulido por nosotros
mismo, debemos dejar que nuestro yo interior se refleje a través de nuestra
personalidad.
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